Primero me sentí despreocupada, luego nerviosa y angustiada, después sensata y fría y ahora calmada y fuerte. Todos esos sentimientos en tan solo un día. Como una mochila, cada sentimiento negativo es agregarle una piedra y cada sentimiento positivo es quitarle peso. Quiero que la mochila quede vacía.
Aquí yo escribo. Escribo lo que no es escuchado y lo que no quiero que sea escuchado. Escribo, escribo y escribo hasta gastar hasta la más mínima idea de mi mente, sacando todo y liberándola. Quitandome peso de la mochila.
Algunos psicólogos dicen que es terapia. No puedo decir que lo sea, pero que ayuda. Ayuda.
Es sentarse, despues del nerviosismo y llanto a descargar lo que no se pudo descargar pensando. Escribiéndo rápidamente, sin pensar y con errores ortográficos. Escribir hasta agotar el alfabeto, ABC, vocales, comas, acentos y mayúsculas y escribiéndo tan rapido que hasta me olvido de etiquetar. ¡Sacate todo pa' fuera!
No dejes que los comentarios te quiten la capacidad para razonar: ¡Siéntate! escribe, en cualquier lado pero escribe. Agota todo. Libétare de todo. Respira profundo y pon música, cualquier musica y escúchala hasta quedarte dormido si quieres.
Libérate cómo quieras, pero libérate.
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