sábado, junio 13, 2009

• No se lo diré a nadie

Cuántas veces hemos escuchado esto. Confiamos una tontería o un secreto importante a una persona, pero cómo saber si realmente podemos confiar en que no dirá lo que le contamos.
Esto me dijo una amiga, y me hiso pensar. Algo es cierto, solemos ser confiados, no se puede vivir en desconfianza con el mundo sería absurdo. Cuando algo nos pasa, algo hacemos o sabemos, tenemos la necesidad de contárcelo a alguien cercano. Esto puede ser por alardear, para acallar nuestra conciencia o para sacar un buen tema para hablar. Y luego pasa la catástrofe, esa persona cuenta lo incontable y una amistad puede caer en problemas, cuando esto pasa se puede llegar a creer que todo el mundo posee una lengua vípeda.
Pero cuantas veces hemos dicho tambien nosotros "Juro que no se lo diré a nadie", pero el deseo nos gana y se lo contamos o a un familiar o a un amigo y así formamos una cadena.
Esto es para mi querida amiga: No hay que perderle la confianza a la gente y guardarse todo para uno, eso hago yo y no te lo aconcejo. Solo hay que medir las palabras y antes de hablar, piensa, y verás qué puedes contar y qué no. Pero nunca está de más el guardarse algo para uno mismo, yo llevo conmigo muchos secretos, mios y ajenos. Y tambien aprende qué secretos se pueden guardar para que no te pesen como rocas. Espero que te sirva de algo, y calma que los problemas pasan. La gente habla, porque el aire es gratis ;)

Angel.-

Por cierto, ya mejoré de la gripe y gracias Clara. :)

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